Roman Pankiewicz: No hay receta para la cría del caballo árabe

Roman Pankiewicz. Foto archivo Polskiearaby.com

Comenzamos la colaboración con la web sobre el caballo árabe Polskiearaby con la entrevista que le hizo Monika Luft, la directora de esta web polaca al polifacético Roman Pankiewicz:

Criador en Albigowa Stud en los años 50, época en que nació el semental Bask (Witraż – Balalajka / Amurath Sahib).
En los años 60 trabajó en Michalow Stud.
Autor de numerosos artículos sobre la historia y la cría de caballos árabes publicados en Polonia y en el extranjero. Sus obras también incluyen libros: “La Cría de caballos árabes polacos 1918-1939” y “Registro de sementales árabes polacos de pura raza” (dos volúmenes: 1944-1983 y 1983-1993), entre otros.

Monika Luft: A menudo bromea que no es usted quien crió a Bask, sino Dios mismo. ¿Es eso modestia o timidez?
Roman Pankiewicz: Uno de mis amigos me dijo una vez: “Tu modestia es falsa”. A día de hoy me arrepiento de que no haber contestado: ¡tu estupidez no tiene límites!

Bask Arabian Horse Stallion
Bask. Foto de public.fotki.com

M. L.: Pero usted es el criador de Bask.
R.P.: No. En caso de que fuese posible que tal hazaña la lograsen las personas, entonces habría diez Basks caminando. ¿Y dónde está un segundo Bask?

M.L.: Así que.., ¿Fue pura coincidencia?
R. P.: Sí, pero por supuesto esta coincidencia requiere un poco de ayuda por nuestra parte. En primer lugar Bask era el hijo de una yegua y un caballo maravillosos, pero Balalajka ha producido descendencia numerosa con Witraż y cada uno de ellos fue diferente. Por ejemplo Bandola y Arfa. ¡Dos tipos completamente diferentes! Bandola ha parido muy buenos sementales; Arfa, numerosas buenas yeguas. Y estaba también Bakalarka, maravillosa, muy delicada, una potra preciosa… Lamentablemente, yo ya tenía a dos hijas de Balalajka y a la propia Balalajka en ese momento, así que Bakalarka se tenía que ir. Es el día de hoy y no puedo sacarla de mi cabeza.

M. L.: ¿La vendieron?
RP: Fue a alguna granja agrícola de propiedad estatal. No había lugar para ella aquí. Nuestro deber era prolongar todas las líneas maternas, porque si perdemos una línea paterna o materna, hubiéramos sido como un pintor que perdió un color, con sus cuadros cada vez más pobres. El número de yeguas se amplió de todos modos… Varias yeguas criadas en Albigowa fueron llevadas a Michalow por el director Ignacy Jaworowski. Quizás Bakalarka o su hermana Barcza fueron “despedidas” porque cuando salieron del hipódromo nadie las vio. Yo no estaba allí en ese momento. Porque si alguien las hubiese visto, se las hubiese llevado a casa. Barcza era grande, robusta, encajaría muy bien en el programa de cría Michalow. Y Bakalarka era un sueño…

ML: ¿Cómo fue posible que esas yeguas no fuesen probadas en la cría? Todos somos conscientes de que había un cierto número de “puestos de trabajo” en las manadas, pero ¿por qué hubo una escasez de “estos” para yeguas excelentes?
RP: La selección se llevó a cabo por inspectores que eran criadores contratados por la Federación de Cría de Animales con Pedigree. No teníamos mucho que decir y eran inspectores de diversos tipos. Con algunos, los de la clase pre-guerra, con gran conocimiento como Juliusz Kloczowski o Marek Piotrowski, hablamos. Mientras que otros simplemente vinieron, descartaron caballos del stud y se fueron. Si hubiese tenido la oportunidad de hablar con tal inspector, yo le hubiese suplicado de rodillas que dejase a Bakalarka. Los inspectores nos trataron como si no tuviéramos ningún conocimiento sobre cría y ni siquiera se molestaron en discutir sus decisiones con nosotros. Una lástima, porque a lo mejor hubiera sido posible salvar más [animales] para la reproducción. Esta fue una de las razones por las que dejé Albigowa. Jaworowski, que era director de Michalow, dejó los “eliminados” en la yeguada a pesar de todo. Un año más tarde se incorporaron de nuevo al stud y fue muy elogiado. Por desgracia, los caballos eliminados de Albigowa fueron comprados por campesinos del condado de Miechów y estos se perdieron definitivamente para nuestra selección de cría.

M.L.: ¿Fue usted quien le dio su nombre a Bask?
R. P.: Sí. Siempre he tratado de dar nombres cortos, agradables, fáciles de traducir porque su exportación había comenzado ya en aquellos tiempos. Y Bask [en polaco] es un valiente habitante del País Vasco en España. Uno de mis amigos que viajaba mucho me dijo que los vascos son gente muy trabajadora. Y así, el caballo se convirtió en Bask, Vasco. Ese nombre le sentaba como ningún otro.

Roman Pankiewicz. Foto de Krzysztof Duzynski
Roman Pankiewicz. Foto de Krzysztof Duzynski

 

ML: Usted escribió que si Dr. La Croix hubiese llegado un día más tarde, no habría encontrado a Bask como semental. ¿Por qué fue considerado inadecuado para la cría? ¿Quién decide su eliminación? Al leer acerca de su maravilloso tipo y su belleza, es difícil de creer que pasó desapercibido en Polonia, entre los expertos.
RP: En aquellos tiempos muchos caballos regresaban de las pistas y eran castrados a gran escala. Es duro decir que el director Andrzej Krzyształowicz no lo apreciase… Lo que pasaba es que los caballos venían de las pistas y decía: cástrenlos. La Croix tampoco era consciente de lo que en un principio Bask representaba en términos de calidad y precio. Compró muchos caballos en esa época y temía que fuesen demasiados. Quería vender algunos, entre ellos a Bask, a cierto criador sueco. Él pagó 3.000 dólares por Bask, por lo que el caballo no era caro. Sin embargo, el sueco no cerró la oferta. Bask, que tenía una cabeza y cuello muy bonitos, comenzó a ir a shows. Y los estadounidenses se enamoraron de él! Ganó todo, incluso en las clases de enganches. Su tasa de reproducción ascendió a 10.000 dólares.

Portada del Libro Registro de Sementales árabes Polacos. Foto de archivo de Polskiearaby
Portada del Libro Registro de Sementales árabes Polacos. Foto de archivo de Polskiearaby

ML: ¿Por qué fue este caballo, y no otro alguno, el que dio en el blanco y se utilizó al máximo?
R. P.: ¿Y por qué encuentres a un hombre atractivo? La Croix no sólo exhibió a Bask, sino a todo un grupo de caballos polacos, pero sólo Bask tuvo tanto éxito porque otros no tuvieron descendientes como los suyos. Cuando los descendientes de Bask comenzaron a ganar en exposiciones, La Croix compró una gran extensión de terreno, construyó una granja en Kentucky y vendió parcelas a criadores de caballos árabes. Muchas granjas se establecieron cerca. Un coche pasaba por todas estas granjas recogiendo las yeguas para ser cubiertas, Bask las cubría y se llevaban a casa por la noche. Ya que estamos en ello, Kentucky tenía una hierba estupenda. Yo incluso quería sembrarla aquí y pedí semillas cuando estuvimos con Jaworowski en Estados Unidos y nos dieron dos paquetes, una para mí y otra para él, pero entonces Jaworowski dijo: “¿Para qué lo necesitas?”, así que la mía se la di a él, y los pollos deben de haber comido esa hierba, porque nunca le oí haberla sembrado… Pero tiene que haber algo en ella. Cuando estuve en Rusia, Siberia, tenía caballos bajo mi cuidado sobre una superficie de 20 mil hectáreas. Y tienen un gran campo de hierba maravillosa (cuando la mordías era dulce). Los caballos comían la hierba con gran placer. No tenía malas hierbas aunque la gente del lugar decía que nadie la sembraba, crecía ahí por sí sola. Trataba de elegir los lugares para pastar de tal manera que así tenía a los caballos mejor alimentados. Y más tarde, incluso cuando recibieron avena verde (los tiempos eran difíciles, nos sentimos agradecidos incluso por eso) nunca enfermaron.

M.L.: ¿Cómo se encontraba en Siberia?
RP: Mi padre vino de una granja kulak [kulaks eran una categoría de ricos campesinos de la Rusia soviética], a 16 km de Grodno en el Distrito Augustów. Mi tío se graduó en la escuela de veterinaria en Viena antes de la guerra. Mi padre era un agricultor muy bueno y se casó con una hija del molinero con dote. Vendió parte de la tierra para pagar sus deudas. Más tarde hizo el dinero en contratos de arrendamiento y adquirió Kapłanowce. Cuando los rusos llegaron tuvo que huir. Se refugió en Suwałki, mientras que yo y mi madre fuimos con nuestro tío, que tenía un molino. El primer transporte de exiliados a Rusia fue en febrero, el segundo en abril de 1940. Mi madre fue capaz de huir a través de las puertas traseras, descalza, mientras mi tío invitaba a los rusos a un vodka … Queríamos llegar hasta el lado alemán, pero nos arrancaron del tren y deportaron a Siberia. Allí pasamos 6 años, primero trabajé en la taiga en la tala de bosques, aunque yo tenía apenas 16 años de edad. Más tarde, mi mamá me consiguió un trabajo en el transporte de la madera. Cuando Władysław Sikorski [General polaco y político] firmó un tratado con Stalin se nos permitió viajar por todo el territorio de Rusia, pero estábamos asustados y permanecimos en esa región. Nos dirigimos a un sovkhoz [una finca agrícola de propiedad estatal en la Rusia soviética], que más tarde se convirtió en un konzawod (un stud). Allí hice absolutamente de todo, conducía un tractor, una cosechadora (harvester), trabajaba en una mina y en un granero. Pero la tarea más difícil para mí era cargar media tonelada de heno o paja en trineos rusos muy pequeños. Más tarde me enteré de que yo debería haber utilizado dos trineos. Después de un tiempo los conducía yo mismo. Más tarde me convertí en el jefe de mozos.

Ferha. Foto archivo de Sr Pankiewicz
Ferha. Foto archivo de Sr Pankiewicz

ML: ¿Cuándo aparecen en su vida los caballos árabes?
RP: Todo empezó cuando compré, en algún momento de 1947 o 1948, [la publicación semanal] “Przekrój” con un artículo escrito por Józef Tyszkowski de Nowy Dwór. Y fue entonces cuando empecé a soñar con los árabes. También figuraba un registro de las yeguas y me fijé en la yegua árabe negra, Ferha (Kuhailan Abu Urkub – Udżda / Kuhailan Kruszan), criada en Gumniska. Y me encantan los caballos negros. Los caballos negros me hicieron “bautizarme”…y “creo” en las coincidencias. Gracias a una casualidad tuve un lugar en Albigowa y más tarde en Michalow. Vine a Albigowa en 1951. Esa fue la primera vez que vi a los árabes en vivo.

ML: ¿De dónde vino la foto de Amurath Sahib de 1949 de encima de su cama?
R. P.: Yo era un aprendiz en Posadowo. El jefe de mozos era Witalis Bielecki, que trabajó en Janów durante la guerra. En una ocasión se enfermó y fui a visitarlo. Y vació una caja con fotografías de caballos, muchas fotografías, y me enamoré de esa foto. Me dio esa foto, le hice una ampliación y la colgué sobre mi cama. Más tarde se la di a los archivos de la Asociación de Cría de Caballo árabe Polaco. En realidad, esa fotografía resultó ser extraordinariamente favorable para el caballo, ya que Amurath Sahib no era tan bello en la vida real como en esa foto.

Amurath Sahib. Foto del archivo Foto archivo del Sr Pankiewicz
Amurath Sahib. Foto del archivo Foto archivo del Sr Pankiewicz

ML: ¿Cómo fueron sus comienzos en Albigowa?
RP: Viajamos con los caballos a la pista de Służewiec, pero como los caballos Albigowa no fueron buenos corredores, nadie los quiso. Pero el gerente de los establos de carreras en ese momento era Bolesław Orłoś, el administrador de Albigowa desde antes de la guerra, por lo que a través de algún apoyo y favoritismo colocó como pudo un caballo por establo y de alguna manera terminó metiéndolos todos en alguna parte. Volvimos a casa, reunió a los mozos y dijo: “Si alguien es talentoso, aprende cosas nuevas con facilidad. Si alguien no tiene talento, pero se aplica en estudiar diligentemente, también acabará sabiendo las cosas. Nuestros caballos no tienen el factor de carreras en ellos genéticamente, pero hay que desarrollar esto en ellos a través del movimiento”. Y después de cuatro años habíamos ganado todo lo que había que ganar en la pista … Sabellina fue a la única que no pudimos vencer – ella era una yegua maravillosa. Pero excepto esto, creo que hemos ganado casi todo lo largo de seis años. Esa es la importancia que tiene la cría de los jóvenes. Maciej Świdziński escribió acerca de la crianza de potros, y yo también. Esperaba que algunos de mis otros colegas escribiesen sobre cómo criar a sus potros, pero eso no sucedió. Porque por lo general los potros eran criados por los mozos o sub-mozos en granjas separadas: en el Stud Michalow en Podlesie, en el Stud Janow en Pożary, en el Stud Posadowo del distante estado de Mokre Ogrody y en el Stud Racot en Darłowo. Si yo volviese a ser criador de nuevo, en otra vida, me gustaría mantener los sementales cerca y criarlos yo. Una vez, el director de nuestra Federación, Stanisław Kurowski, dijo en una reunión “Si un criador de caballos todavía tiene tiempo para algo más que la cría de caballos, significa que es un mal criador”. En esa época teníamos muchas obligaciones. En Gogolewo había graneros, apriscos y al final no tuve mucho tiempo para los caballos. En Albigowa designé un muchacho joven, Kazio Sitek, para ser el jefe de mozos. Todo el mundo siempre dice que la gente necesita tener órdenes establecidas. Y yo dije: “Kazio, antes de hacer algo, piensa primero si puedes hacerlo de una manera mejor”. Y él fue un mozo genial.

M. L.: Usted solía montar a Witraż en Albigowa. Pero al parecer, él no era una montura ideal…
RP: Él tuvo, como sabemos, una infancia difícil en tiempos de guerra y era un poco sensible. Por ejemplo, cuando vio una caja de cigarrillos a un lado de la carretera, saltó de lado. Existe esta regla de que cuando se sospecha que un caballo va a evitar algo, tú debes de tensar las riendas y utilizar las ayudas de las piernas. Pero cuando vi la caja, dejé las riendas sueltas y separé las piernas de los lados del caballo. ¡Se quedó tonto y no sabía qué hacer! Casi me muero riendo mientras él caminaba con mucho cuidado y se quedaba mirando a la caja… Y no había nada que él pudiera temer. Había varias dificultades con Witraż, su progenie era también difícil en ese sentido. Teníamos un trabajador, de la policía secreta comunista (cada lugar de trabajo tenía que tener uno). Una vez, yo iba a ir un viaje de negocios y quería dar el paseo diario montando a Witraż, por la mañana. Fui a su puesto y este mozo le estaba ensillando. El caballo estaba atado con una cabezada fuerte, pero sin embargo logró alzarse y caer con la cabezada rota en pedazos… Este chico “policía secreta” estaba justo a su lado. Si algo le hubiese pasado, yo habría sido encerrado. El árabe es un caballo sensible y fácil de estropear. Es muy delicado y sensible a todo. Un caballo de tiro tiene una naturaleza diferente, y no es fácil desequilibrarlo.

Witraz. Foto archivo del Sr Pankiewicz
Witraz. Foto archivo del Sr Pankiewicz

ML: Usted ha trabajado en ocho lugares diferentes . ¿Dónde?
RP: Cuando me matriculé, yo quería trabajar con los caballos, pero como yo era un aprendiz, el dinero que se ofrecía no era suficiente para mantener a mí y a mi madre. Me convertí en instructor en la Escuela Secundaria de Agricultura en Poznan y Szamotuły, en la que me gradué. Durante un evento deportivo en Poznań conocí a Jaworowski, que era por aquel entonces ayudante en Racot Stud. Y él fue quien me llevó a Racot. Cuando dejó ese stud, yo trabajaba como inspector de cría de caballos en la oficina regional en Poznań. Pero me moría de ganas de volver a un Stud… No había ningún puesto vacante en Albigowa en aquel momento, sin embargo después de un tiempo aparecieron disponibles y trabajé allí hasta 1958. Más tarde me transfirieron a Gogolewo. En 1959 me fui a Michalow para una inspección y resultó que había una vacante y estuve allí como ayudante. Pero yo tenía un piso terrible, húmedo y una de mis hijas estaba enferma todo el tiempo. Los médicos declararon que se trataba de una alergia al pelo de caballo. Así que nos mudamos de Michalow y nos establecimos cerca de Czestochowa, que a su vez tenía una fábrica de cemento. Y fue entonces cuando mi hija empezó realmente a estar enferma! Así que sabíamos que no tenía nada que ver con los caballos. Fui al Depósito de Sementales de Bogusławice y permanecí allí 16 años, hasta mi jubilación. Y durante el retiro empecé a escribir.

M. L.: Y usted escribió siete libros.
R. P.: Siete y medio. Todavía me gustaría terminar un libro sobre yeguas Albigowa. Espero disponer del tiempo.

Portada del libro Cría del árabe polaco
Portada del libro Cría del árabe polaco

ML: ¿Cuál fue la mejor época para la cría polaca,¿ los tiempos modernos o uno de los períodos pasados?
RP: Creo que la cría polaca hizo mucho bien para la imagen de Polonia en el extranjero. La gente importante de América comenzó a viajar a nuestro país, a pesar de que se pensaba que los osos polares caminaban por nuestras calles. ¡Y nuestros caballos fueron a todos los rincones del mundo! No sé si vamos a vivir para ver una era como esa en Polonia de nuevo. Hoy en día la cría requiere un gran capital; nosotros no tenemos tal capital.

ML: ¿Cómo se puede evaluar el estado actual de la cría en Polonia?
RP: Nuestra cría está muy estabilizada, genéticamente fuerte. Aunque es difícil de cambiar a algo moderno, todavía nuestras yeguas dan descendencia buena y por eso son muy valiosas. Ellas hacen una buena base.

ML: ¿Cómo resumir 20 años de la cría privada polaca?
RP: Esa es la misma cantidad de tiempo que entre 1919 y 1939. Los caballos del período de entre guerras fueron criados por personas que tenían tradición de cría, mientras que hoy son criados principalmente por personas que tienen dinero y eso es una gran diferencia. La cría privada es como una burbuja de jabón, ya ha pasado antes, por ejemplo en los EE.UU., esa separación fue suficiente para destruir la cría entera.

ML: Entonces, según usted, ¿son estos últimos 20 años un éxito o un período perdido?
R. P.: Ninguno de los dos. La reproducción privada en la actual Polonia comenzó con los caballos adquiridos de Studs estatales, que fueron descartados o estaban baratos, no es el mejor material. A menudo dirigidos por personas que no tienen mucho conocimiento sobre caballos árabes. Esto se traduce en una calidad mediocre, aunque con algunas excepciones. Pero eso no quiere decir que las ganaderías pequeñas no puedan abrirse paso en la escena. Recordamos el Stud Kraśnica, que tuvieron dos yeguas, una no dio nada, pero la otra! … Entonces, la comunidad de cría en el período de entre guerras era diferente, más integrada. Las personas se ayudaban mutuamente. Eso es lo que Adam Sosnowski me dijo de aquellos tiempos.

ML: ¿Cómo ve el futuro de la cría polaca? Un millar de yeguas árabes. ¿Es bueno o malo?
R. P.: En mi opinión, malo. Algunas de ellas están en las manos equivocadas. En 1939 había 22 criadores que tenían una yegua cada uno, 12 tenían dos, 8 tenían tres, cuatro tenían cuatro, 1 tenía cinco, 2 tenían siete, 2 tenían ocho y 1 tenía nueve. Y, por supuesto Janów tenía veinte y algo. Un total de 164 yeguas en las manos de unos 60 criadores. Ellos viajaban a Babolna para comprar caballos, a Yugoslavia, Inglaterra e incluso Arabia. Pero la cría está determinada por el mercado. Si no hay mercado, no hay reproducción. ¿Habrá un mercado para la progenie de mil yeguas? Yo lo dudo.

M. L.: Su mayor satisfacción como criador…¿Bask?
RP: No, no fue Bask, porque él no era de mi cría. Pero yo tuve otros éxitos. Hubo un inspector excepcional, Juliusz Kloczowski. Llegó a Albigowa para crear un plan de mejoramiento para ese año. Le rogué que metiese a criar a la yegua negra Ferha con Trypolis. Ellos realmente no se adaptaron el uno al otro, pero de alguna manera tuve la sensación de que podría ser un buen movimiento. El resultado fue por un lado el semental Faher, que prolongó la famosa línea paterna de Krzyżyk.;por otra parte, Gastronomia (Marabut – Ofirka / Ofir). Ella fue descartada varias veces y la rescaté otras tantas. Ella mostró su gratitud con la producción de caballos maravillosos! Or Elza (Rasim Pierwszy – El Zabibe / III Rasim), una yegua discreta, pero me gustaba mucho. Tristemente, murió trágicamente. Pero sus hijas fueron Celina, Ellora y Elżunia. Celina se convirtió en campeona en Inglaterra, Ellora dio muchos valioso descendientes, Elżunia se vendió rápidamente en el extranjero. En este caso sólo hay que “sentir algo”, al igual que con las mujeres. Fui a la escuela secundaria en Poznań, mi esposa en Rokietnica. Nos conocimos en un baile, la miré a los ojos, me enamoré … No sé por qué. Y vivimos juntos durante 55 años.

Faher. Fuente public.fotki.com
Faher. Fuente public.fotki.com

M. L.: ¿La decepción más grande en la cría?
R. P
.: He luchado por la compra de Nabor. La línea paterna de Skowronek, algo evidente. Cuando lo vi me encantó: una maravillosa cabeza blanca y hermosos ojos negros, ollares… Y me lo dieron (me había esforzado mucho). Comencé a observarlo cuando llegó, que ya había pasado la época de reproducción y todas las yeguas estaban cubiertas. Después de un año de observación reconocí que no se ajustaba a las hijas de Witraż. Cuando llegó Jaworowski le dije “Toma este semental, porque va a ser bueno para las hijas de Amurath Sahib”. Y fue y dio progenie espléndida con ellas. Ese fue el comienzo de la de línea “E”. Mientras que él no dejó una marca en mi stud, aunque lo había soñado, en Albigowa dio la mejor progenie con una nieta de Amurath Sahib, pero este potro nació después de la salida de Nabor a Michalow.

M. L.: ¿La decisión más difícil?
RP
: La salida de Albigowa, de mis queridos caballos, que sobresalieron tanto en la pista como en la reproducción. Dejar eso y partir, no fue fácil, pero cuando yo estaba empezando, siendo sólo un aprendiz, tenía más oportunidades para tomar decisiones que más tarde, cuando me convertí en ayudante de director. Resultó que no tenía nada que decir entonces. Descartaron lo que yo quería conservar. Hubo ayudas para yeguas, por eso los potros fueron descartados, para mejorar la situación financiera del stud. Sin embargo, yo tenía grandes esperanzas en los potros. Y ellos fueron eliminados … Acordé  un traslado a Gogolewo. Volví a los caballos árabes cuando me enteré de una oportunidad en Michalow. Aquí todos los conceptos pertenecían a Jaworowski, yo estaba listo para eso por lo que no fue frustrante.

M. L.: El caballo de su vida fue …

R. P.: Balalajka. Me encantaba esa yegua. Tenía algo … Ella era tan tierna que la podías abrazar, acariciar . Ella nunca hizo daño a nadie.

Balalajka. Foto de archivo del Sr Pankiewicz
Balalajka. Foto de archivo del Sr Pankiewicz

M.L.: ¿Es la cría un trabajo, una pasión o un calvario? O tal vez una llamada?

RP: Probablemente te reirás, mi respuesta es que es un calvario. Porque cuando se hace algo, tú puedes más o menos predecir el efecto y en la cría no tengo ninguna certeza. Balalajka dio nueve descendientes con Witraż y ¡cada uno era diferente! Si yo naciese de nuevo, nunca volvería a la cría de caballos. Junto a los caballos también crié ganado y eso nos entusiasmaba! Usted cogía un buen toro, alimentaba a las vacas adecuadamente y tenía un buen resultado. Mientras que en el caso de los caballos los seleccionabas y la selección no tenía ningún efecto, a pesar de que tenías las mejores intenciones y habilidad adquirida con los años. Cuando un artesano hace algo, se convierte en el mejor con el tiempo. Si se toma el tiempo de aprender, se convertirá en un oficial, después tal vez incluso un maestro artesano pero un artista tiene que ser creado por Dios. Usted no puede adquirir eso. Para mí Maciej Świdziński, que criaba Pura Sangres en el Stud Golejewko, era un artista. El criador italiano Federico Tesio era un artista. A su muerte, los caballos seguían allí pero, los éxitos terminaron ya que había una falta de su experiencia.

ML: En el prólogo de “Los Siete Magníficos” usted escribió: “Estoy agradecido a la suerte de haber tenido la oportunidad de conocer a sementales tan maravillosos en mi vida. No sé si me encontré gente tan maravillosa. “Eso suena un poco amargo…

RP: Cuando se trata de gente sobre la que pueda decir: eran criadores y tuve un lenguaje común, fueron: Juliusz Kloczowski, inspector; Marek Piotrowski, director del Departamento de cría de caballos; el experto equino Adam Sosnowski, inspector de cría en Sopot durante 25 años; el director Andrzej Krzyształowicz; el director Ignacy Jaworowski. Sin embargo, la cría es una visión original y propia de cada criador. Tyszkowski usó a Comet, pero en Janów, Comet crió con sólo 5 yeguas y se fue a Michalow inmediatamente porque a Krzyształowicz no le gustaba. Como sabemos, Krzyształowicz no utilizó Monogramm tampoco, ni siquiera quiso ver un vídeo de ese caballo y se fue de la habitación. Jaworowski a su vez no utilizó ni una sola vez a Czort. Creo que si se cruzan dos cosas parecidas, obtendremos algo similar. Si cruzamos dos cosas distintas, hay una posibilidad de conseguir algo interesante. Witraż es el mejor ejemplo. Su padre – un 100% Kuhailan, su madre – un Saklavi, Makata por Fetysz. Y el resultado fue un caballo que no sólo era hermoso, sino que engendró progenie buena. Así que la cría es impredecible. Nadie debe pensar que tiene una receta para la cría. Nada de eso existe!

Portada del Libro Los Siete Magníficos. Título original Seven Splendids
Portada del Libro Los Siete Magníficos. Título original Seven Splendids

 

Autora de la entrevista: Monika Luft | Polskiearaby.com

Traducción al español: Luz González | Arabigan.com

Versión inglesa English version versión polaca Vesrja polska

 

Polskiearaby y Arabigan comienzan a colaborar

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Luz González

Licenciada en Veterinaria y Máster en Marketing Digital. Escribo para Arábigan.com desde el 2008 y para otros clientes desde el 2014. ¿Quieres que escriba para tu empresa ecuestre? Contáctame en info@arabigan.com o en el teléfono 667 42 52 30

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